La gran residencia de Bad Bunny en Puerto Rico 🐰🇵🇷

Desde que Benito anunció su residencia “No Me Quiero Ir de Aquí” en el Choli, Puerto Rico entró en modo full Bad Bunny. El anuncio cayó como un rayo a mediados de enero de 2025: ¡30 conciertos! Sí, leíste bien. Treinta funciones entre el 11 de julio a el 14 de septiembre, haciendo historia como la primera residencia de conciertos en la isla.

Las filas para comprar boletos fueron otro evento por sí solo. Se formaron en puntos de venta desde la madrugada y hasta días antes, con gente en sillas plegables, neveritas, música de fondo, coros espontáneos de todas sus canciones y hasta fogones improvisados. Las redes explotaron y la vibra era como una fiesta antes de la fiesta.

La demanda fue tan salvaje que en menos de 4 horas se vendieron más de 400,000 boletos. Las primeras 9 funciones eran solo para residentes, más adelante se abrieron al mundo. Se espera que lleguen fanáticos de más de 30 países — desde Colombia, España, Estados Unidos, hasta Japón. Turismo total. Se estima que más de 600,000 visitantes moverán la economía de la isla durante estos tres meses. Hoteles llenos a capacidad, guaguas alquiladas, chinchorros encendidos y los Uber en su peak.

¿Y la economía? Mira, Benito básicamente sacudió la caja registradora de Puerto Rico. Solo San Juan proyecta casi $302 millones en ingresos. En total, la residencia podría dejar sobre $377 millones, creando más de 3,600 empleos temporeros. Estamos hablando de meseros, barberos, guías turísticos, diseñadores, costureras… todo el mundo está pillando algo del party.

Ahora hablemos del flow. La gente se está tirando con outfits brutales: desde corsets y botas de plataforma, hasta sombreros de paja y camisas jíbaras en remix con estilo urbano. ¡Los looks están de pasarela! Y no faltan los que llegan en full reggaetón mode, con gorras, cadenas y mucho brillo.

Cada show de Bad Bunny es una película. Dura casi tres horas, dividido en cinco actos. El escenario está brutal: visuales de flamboyanes, pirotecnia, una tarima que se transforma y hasta música de bomba y plena en vivo. Ha traído invitados como Jhayco, Pedro Capó, Jowell y Randy y hasta Los Pleneros de la Cresta. Es un fiestón cultural que mezcla lo moderno con lo de aquí, de raíz.

Pero esto no es solo música. Bad Bunny está usando estos conciertos para enviar un mensaje: “Aquí estoy, y esta es mi tierra.” Desde el inicio dejó claro que esto no es para los turistas que vienen a faltarle el respeto a la isla. Esto es para los boricuas y los que la aman de verdad. Cada noche, entre canción y canción, Benito suelta uno que otro mensajito de amor propio, de orgullo patrio y de resistencia.

Y por si fuera poco, ¡estrenó música nueva en vivo! “Alambre Púa”, por ejemplo, se escuchó por primera vez en estas funciones. Literalmente, historia viva.

Curiosidades de Bad Bunny

  • Récord histórico en el Choli – Con su residencia “No Me Quiero Ir de Aquí”, Bad Bunny se convirtió en el primer artista en hacer 30 conciertos en el Coliseo de Puerto Rico, superando todos los récords previos.
  • El Conejo rompe Billboard – Es el primer artista latino en colocar más de 100 canciones en el Billboard Hot 100. Hasta julio de 2025, suma 113 temas en la lista. ¡Una bestia!
  • Tiene su propio diccionario – En TikTok y Twitter existen glosarios no oficiales con sus frases más icónicas.
  • El jíbaro urbano – Ha convertido elementos tradicionales como la pava, el cuatro y la plena en íconos de la moda y cultura pop global.
  • Fan de la lucha libre – Además de participar en WrestleMania, ganó elogios por su técnica real. Los mismos luchadores dicen que “entrena como uno de ellos”.
  • Profe de cultura puertorriqueña – En sus conciertos mezcla reguetón con bomba, plena, salsa y hasta trova. Y siempre da lecciones sobre la historia de la isla entre canción y canción.
  • El más escuchado del mundo – Fue el artista más escuchado a nivel global en Spotify en 2020, 2021 y 2022. Y sigue dominando listas en 2025.

Esto no es solo una serie de conciertos. Esto es una declaración cultural, una inyección de alegría para el país, y un abrazo masivo entre Bad Bunny y su gente. Benito no se quiere ir… y nosotros tampoco.

¿Quién dijo que los conciertos no pueden cambiar una isla?

Cuéntanos, ¿Para cuál de sus conciertos vas?